martes, 11 de septiembre de 2007

LLUEVE

LLUEVE, entre pausas, sobre las piedras

redondas, asustadas sin razón.

Cubren toda la orilla de la cala.

Están quietas. Ahora el mar suena

a la vez que el deseo de cambiar

junta y destroza espuma en olas breves

que acaban serenísimas. El tiempo

parece una voz que nada dice.

Otro tiempo imposible lo desmiente

en cada terminarse de las olas,

más breves que la lluvia. Sorprendidas

por su propio agolparse sin sentido.



Lluvia en la cala



Lawrence Alma Tadema


3 comentarios:

Edanmir dijo...

Tu estas con el mar, yo con las piedras redondas de lluvia y olas...

Churra dijo...

El tiempo parece una voz que nada dice , pero si que dice ....
(que no habia venido yo por aqui, y que placer . Me relajas
Un abrazo

Índigo dijo...

El placer es mío,Churra: pasa sin llamar. Besitos