Pálido, pálido está el loro
del gran capitán pirata,
tiene enfermo el corazón
y tiene enferma una pata,
con sus plumas de colores
vuela de un cañón de plata
a una cuchara de oro
igual que a saltos de mata,
va por el barco lo mismo
que un abismo chundarata,
va lo mismo que alma en pena
soltando pluma escarlata,
espelechando de amores
con repeluznos de rata,
gimiendo de negro el barco,
pidiendo fresas con nata,
gimiendo de negro el mundo
y negra la mar ingrata,
gimiendo que la negrura
le viene encima y lo mata,
un marinero va y dice:
el bicho nos da la lata;
le arrea un sopapo de amores
y lo alivia y lo remata,
luego en un rincón del barco
el loro estira la pata,
y luego con mucho amor
se lo merienda la gata.
Miguel Romero Esteo
(Francine van Hove)
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1 comentario:
¡¡¡que bueno !!!!
Ya vi tu pato...mira que no te imaginaba yo con un patito .
besos
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